Actuabas como los genios del arte, proporcionando caricias falsas a un alma en pena, con el valor en el suelo con los deseos rotos, vertiendo besos prohibidos susurrándome mentiras al oído creando cuentos ideales donde un tu y yo hacen magia, mintiendo en mi carne mintiendo en mis labios creando tu obra.
Wow, aún me sorprenden esas caricias traviesas que decían esto es terrestre pero fantástico, esto es mortal, aquellas miradas que reflejaban todo un mundo infinito que no conocían mis alas rotas que juraste curar.
Pero hoy te digo bravo me la creí toda tu actuación y es más casi me convenzo de tu amor por mí de tus cafés mañaneros, de tus lunas donde decías, que solo estaba yo. Bravo que increíble casi me trago este cuento de un tu y yo perfectos donde decías que la mujer perfecta era yo.
Hoy te aplaudo y me rio a la vez porque mientras tu actuabas con tus mil, te quieros. Yo te mentía con la verdad con la mujer fría que soy con mis besos falsos que se los daba a mis recuerdos, con mis frías formas de responder con mi locura innata claro no por ti.
Si tu sabes actuar créeme yo no hago porque yo con un beso te puedo enseñar el cielo y al mismo tiempo bajar al infierno.
Tu trataste de actuar conmigo y con ella pero créeme aquí el único de los dos que pierde eres tu porque te regalo a ella, a mí la basura no me llena es más me vacía, te dejo lejos de mi amor puro que no te quiere y jamás te quiso.
De allí decías que yo era una gran actriz créeme jamás te mentí te dije la verdad allá tu si no sabes valorar unas alas rotas y un café mañanero.
Fernanda Aracely Moreno