La Juana que no era loca,
sino algo desquiciada
enamoró a Jacinto Roca
su prenda mas codiciada.
Él era algo quedado
su trabajo prevalecía
pero está embobado
del amor que le ofrecía.
El tiempo se fue pasando
Jacinto ya no reía
el trabajo achicando
La Juana solo tejía.
Usted debe pensar
que a sus hijos le tejía
craso error al explicar
un gorro ella ponía.
Entre unos tumultos naciendo
en la frente de Jacinto
el gorro iba poniendo
tan grande que le llegaba al cinto.