20 de Agosto
Entraste ese día
Un día que quedo gravado en la eternidad.
El saludo fue un beso
Te tome entre mis brazos
Te arranque la ropa
Me llene de tus senos
Tu piel se fundió a la mía
Tu cuerpo destilaba perfume
Mis manos se perdieron en tus muslos
Bese cada rincón de tu cuerpo
Cada beso era más intenso
Se convirtieron en mordidas
Mordías mi alma
Los minutos se convirtieron en horas
Me perdí en ti
Más tú me encontraste
Mis sabanas quedaron llenas de tu perfume
Estas en cada rincón de mi habitación
Saliste de aquí sin decir una palabra
En tu partida laqueaste la puerta
Quebraste la chapa
Ahora me encuentro aquí, solo en esta habitación
Esas mordidas se convirtieron en cicatrices
Cicatrices que veo cada día
Las cicatrices destilan tu perfume
Perfume que me dice tu nombre