La otra no imagina
ni idea tiene del amor
que ha producido.
Tanto que tu corazón bandido
no pudo recibir
todo el cariño y la pasión
de lo que he concedido.
Te amé con locura
y entre las comisuras
de la piel y los labios
aún conservo los besos
y en los oídos tus suspiros.
Que jamás sentirá la otra
que has elegido
porque ni idea tiene
ni interés de estar contigo.