MODESTOELPOETA1953

VIVO, ENTRE LA MATERIA Y LA CONCIENCIA, DE MI EXISTIR

                     

Hay palabras que no necesitan respuesta

Y otras que no las tienen, aunque proceda

¡Como un mudo silencio, detrás de la puerta!

Que  te impide nombrar, la palabra perfecta…

 

Se encierra en el muro, de nuestro desván

Y no para de cavilar, pero no nos sale la palabra

Para contar la historia que dicta la realidad

Difícil y tormentosa llena de ideología, macabra…

 

Son los velos del luto, que en vida llevamos

Yo lo siento así en mi nublada conciencia

Palabras que se dicen sin más, en el cosmos,

De nuestra dilatada vanidad  é  importancia…

 

Yo voy camino en ciudades con espacios

Para desenterrar la sonrisa y las caricias

Del cementerio, que habita en nosotros

Y  pasan cada día y no hay marcha atrás…

 

Palabras, discursos sentencias y abusos

Van rondando los caminos del mal

Mientras los que predican, evangelios

En las iglesias, abusan de su sexualidad…

 

Engañando a niños y aunque son unos pocos

En piezas a dudar y entierras palabras mudas

Gritando desde el cementerio, de  los locos

Que viven dentro de mí, lleno de mil dudas…

 

No le tengo miedo a la muerte, ni quiero morir

Pero en mi cementerio hay muchas preguntas

Que se quedan sin respuesta, en mi sentir

Por eso prefiero ser mudo, en mis catacumbas…

 

¿Verdad, mentira? Todo es materia y sacrificio

Aunque vivo a mi manera feliz, en mi cementerio

Quizás sea la poesía que ansían, mis adentros

O locuras difusas, que no tengan  ningún criterio…

 

   ¡Un epilogo una respuesta, a mi misma pregunta, desde el cementerio de mi tumba, un paseo por la depresión y la penumbra!

 

Modesto Ruiz Martínez / sábado, 27 de marzo de 2010