Vino y me traía un regalo ,
era tu fotografía ,
la cual venía dirigida con un mensaje .
Que decía ,
deposítala donde tienes las otras ,
si , ahí , en tu corazón .
Y así , lo hice ,
ese álbum ,
cada vez es más grande ,
sus páginas ,
son incontables ,
así como el expresar ,
de mi sentir .
Y de regreso ,
le pedí a la señora del cielo ,
llévale mis besos ,
que le encantan recibirlos .
Cuando se asoma al jardín ,
porque sabe ,
que allí , la atrapo con mis brazos ,
que solo saben . . . entregar calidez .