Dama alta, alondra...
cristalina y lánguida fiereza,
en el pecho opalino que te besa
entre cálidas endechas compungidas:
de meu amada...
de meu amiga...
la constante y lacerante
espada entristecida de la espera,
en campos opalinos
y de mágica belleza...
el canto barbifiero
y melancólicamente ennoblecido,
de la rosa diamantina
que te sueña.
AUTOR: JOSÉ A. PANIAGUA MARTÍNEZ.
P. D.: A LA MEMORIA DEL POETA ESPAÑOL DON JORGE GUILLÉN,
UN ALMA LÍRICA... INIGUALABLE.