Hay entre las penumbras
silencios desgranados
cuevas insondables,
con versos postergados.
Que aprenden del tiempo,
del calor en el invierno,
del frío entendimiento
y no es total la mentira
pero la verdad queda adentro.
Como ave que flaquea
a los ojos de los vientos,
la imaginación perdura,
cuando se muere un te quiero
el amor se resquebraja
con la pasión que me invade
sigo sosteniendo el cielo.