¡Bella mía!... ¡Cielo puro!,
solo verte, tanto sana…
Estas ansias, esta llaga;
mucho duele cuando faltas.
Dame pronto vida plena;
trae frescas flores blancas…
También quiero labios tuyos…
Rico néctar, boca grana…
Tiernos mimos, pecho nudo,
ambas sienes piden, claman…
Cada hora… larga dicha
sentir porque, amor, llegas…
Miras, ríes, besas… ¡Amas!