Miles abandonan sus casas,
Madres,hermanos,niños, esposas,
Sin titubear entran en barcaza.
Despavoridos y despojadas
Navegando rumbo a la muerte,
La luna se oculta de horror,
El sol se vuelve inclemente,
Que misterio o profecía se esconde.
El universo se pone en contra,
Sus dioses se han dormido,
EL mundo les da la espalda,
Solo una opción dará la suerte,
Cara o cruz ó se salvan.
O compartirán la peor muerte.
Para salvarlos no hay ninguno,
Sólo un poco de esperanza,
Bello puerto de color aguamarina
Ostenta una grande cruz negra,
Alagado de muertos y un ciento
De cabezas alzando las manos
Hasta aquí oigo sus voces y lamentos,
Y yo me muero de melancolía e impotencia.