Hasta cuando.
Hasta cuando comeremos la rabia humana,
la desdicha de su impaciente miseria abultada;
hasta cuando pariremos sombras de angustia,
esperando un no sé qué de aquellos.
El pueblo murmulla es su cálido amor:
\"en el plenilunio de nuestra riqueza;
ellos son el Dios.\"
Hasta cuando la miseria roerá nuestra excelsa alegría,
que de tristes en triste buscamos.
Oh Dios mio cuanto dolor hay que pagar
para que este extraño mirar inquitante
penetre nuestra cruda realidad
y este sufrimiento huya cual demonios de Cristo.
Hasta cuando comeremos de este plato vacío,
cual abara miseria corrompida
se muestra hipócrita y te besa un vacío sin amor
y el corazón duele mucho ante la miseria.
Hasta cuando lloraremos en silente agonía
mientras el pan se nos quema a la vista del hombre,
a de ser duro el amor en sus corazones
que aman un amor que no sabe a amor.
Hasta cuando viviremos en la rabia de un Dios humano,
que te reniega y te ama un amor amargo;
cuando terminará nuestra magna amargura,
a de ser en algún celaje que Dios a amado.