-¿tomarías mi mano?
-Asienta mientras le abraza y ella pone sus manos contra su pecho
Y ruedan en el pasto abrasados y quedan de frente
-¿oye te puedo decir algo? –
Él la mira profundamente a los ojos, unísonamente se ven después
Un silencio tan apacible apaña el momento, todo el mundo gira al redor de ellos, ante su mano y su corazón que palpita, ambos amantes, siguen viéndose a los ojos y después a los labios como si fueran uno solo
Ella le pone su dedo índice en la boca en señal de que el silencio siga
Como si eso fuera lo que buscara,
¿Cuánto tiempo te espere? Asienta ahora el joven, después de un silencio largo y a la vez corto
-¿Me quieres? –te quiero, te he amado desde que supe que mi destino era concerté.
Una lágrima recorre su cara haciendo un camino como el agua de un rio que se desborda, se desborda
Ellos saben que se aman y nada acabara porque nada acaba de iniciar
Adiós gracias sabes todo es una enseñanza, incluso el error más grande el sueño más perdido y las lágrimas más amargas nos tiñen a los dos por amor de nuestra causa y camino de nuestro destino hasta el amor más grande acaba cuando nace otra vez.
Renace de las cenizas de lo incomprensible para ser lo mismo y nunca acabar…