He vivido para dar cumplimiento a mi yo,
soy quien fui desde el principio,
me recupero cada día,
en cada mañana y cada segundo,
renaciendo así yo misma a quien soy.
Nada debo ni me debo, ni sueño,
ni permanezco, ni me voy,
ni soy nunca quien no soy.
Me levanto, me recupero,
me celebro y me engalano
como un niño en domingo.
Me miro y me encuentro,
es hermoso mirarse y encontrarse.
Vivo para dar cumplimiento a mi yo.