Oh destino cruel y desconocido,
en ti se esconde el más codiciado final.
En el camino a tu encuentro
Sabes como jugar
Describiendo una imagen tuya
Sutilmente deseable.
Saber tan poco de ti
es lo que se vuelve realmente atrayente,
Porque en la bastarda existencia humana
La única esperanza segura es tu agraciado nombre.
Ven pronto a mí
y permíteme descansar en tu regazo.
Envuélveme en tu rapaz mundo
Y déjame habitar allí para olvidar la existencia del tiempo.
Sabia y exquisita es tu naturaleza,
deseable y despiadada es tu llegada;
Necesito que me busques pronto
Y me enseñes tus moradas.
Hay quienes dicen que no deberías existir.
Hay quienes intentan descifrar la incógnita de tu existencia.
Yo sólo busco la manera de acelerar tu llegada,
Y que en un instante raudo, me llames por nombre
Y al fin pueda escapar de la fantasía que me encierra.
No tardes demasiado.
Cuando llegues confirma mis palabras.
Haz que mis deseos se cumplan,
Y en la negrura de tu esencia
Encadéname a la realidad que tú me ofreces.