Hay gente dice creída, ¡yo no me vendo por nada!
pero todo y todos en la vida tenemos un precio puesto,
siempre habrá ese momento que aceptemos lo dispuesto,
y al final la propia vida será la que ordena y manda,
qué fácil es presumir cuando nadie te hace ofertas;
mas si alguien nos propone algo a cambio que interesa,
nos tragamos el orgullo, agachamos la cabeza,
ya no existe el no venderse en esta vida de apuestas,
pensarás muy diferente y de íntegro presumirás,
pues es fácil aguantar teniendo posibilidad,
pero ya me contarás si es que pasas necesidad, cómo las ideas que tienes rápido cambiarás,
así mientras nadie oferte bien fácil yo aguantaré
y el peligro se advierte al atreverse a decir:
\"yo nunca pienso beber de este agua que está aquí\",
mas si me dan lo que quiero harto en beber me hallaré.
Así es que mejor no tratemos de buscar explicación;
pues es dificil descifrar lo que
NO TIENE SOLUCIÓN.
SSM.14-03-2016.