No... No vuelvas por favor;
mis fuerzas no podrán resistir
ver de nuevo tu presencia.
Otra partida, muerte será de nuevo...
Mis ojos ya enterraron la alegría;
no es justo que se engañen
con otra fantasía,
dentro del espejismo donde quieres la vida.
Quédate en mis recuerdos...
Lo bueno, lo feliz,
que ahora vive en mi memoria.