Quiero verla acercar, reir,
verla caminar, ver sus ojos,
mirando a los mios,
que sus pupilas se delaten,
verla enojar,
ver sus labios a grietados,
secos como desierto,
como tierra necesitada, de humedad,
verte acercar a mis labios.
Y ahi...
Ya no ver nada...
Solo lo oscuro, no solo verlo,
sentirlo,
y tocar todo aquello
que hemos querido.