Está lagrima cristalina y salobre
va en ruta a un océano muerto,
melancolía y bruma enluta el puerto,
donde quede vacío de ti y pobre.
Si miras hoy mi semblante yerto
quedaras sorprendida, y sobre
tu piel los rayos de sol color cobre
dibujaran este amor hoy desierto.
Me quedo con una desesperanza eterna
y las tristezas marcadas en mis arrugas
porque ya no hay mas noche tierna,
ahora son todas las noches retorcidas
y la fe con tu diaria ausencia subyugas,
marcando en soledad mis venideras vidas.