Capa tras capa,
el polvo del tiempo,
forma la piel
que engendra el cosmos.
En silencio
cultivas efímera existencia.
Heredas y cedes,
la sabiduría del mundo.
Transpiran tus manos
sangre y trigo.
Nacen callos de amor
en las artesas.
Germinan en tu vientre,
las alas del hombre,
su infinito camino.
En ti, por ti, Mujer,
buscando cielo,
hallé universos.