Aprendí como a quererte,
a no hacerlo por las dudas.
Aprendí a no quererte,
Aprendí a no necesitarte,
Aprendí a volver a saber como no pensar en ti, como pasar la noche sola.
Sin que me preocupe si me vas a ver o escribir o si al menos te recuerdo.
Aprendí a volver a vivir sola siempre, desde el primer día.
Así, entonces esto es más bien una puesta en práctica de lo que he aprendido en todo este tiempo.