Este papel de nieve inmaculada
que espera el galopar de la escritura,
me ofrece en su desierto de blancura
la calma de una casa inhabitada.
Me invita a pasear de madrugada
iluminando la vereda oscura,
y a buscar esa mágica locura
que la palabra tiene resguardada.
Esta hoja, bendecida por un verso,
cobija la ilusión invulnerable
de llegar mansamente hasta sus ojos
y anclar en un rincón de su universo.
Quizás viva la dicha insuperable
de ser besada por sus labios rojos.
Derechos reservados por Ruben Maldonado.