Siento así, tu perfume rozándome
tan cerca que creo a veces haberte encontrado.
Un día pienso que elegí el tiquete adecuado
trayecto al olvido, la felicidad o a Dios
prohibido elixir de vida verdadera.
Saberme de una sola vez helado y tranquilo
con mi ecuación para reír sin pensar...
Viento: eres mentira que rodea mi olfato
¡refundes mi percepción y me envenenas!.
Sólo un perfume en que consumo mi vida
cuando encuentro oscuro a mi Dios soberano.
Gran desierto mientras lloro.