Yo quise ser
la dueña de tu corazón,
ser esa estrella lejana
que tocara tu calor.
Yo quise ser
la última mujer de tu vida,
la que cerrara tus ojos
y besara tus labios
por última vez.
Quise ser
el sendero siempre anhelado,
la piel que gustoso recorrieras
y la emoción que sintieras
al acercarte junto a mi.
Quise ser en tu vida
algo más que una más,
quise ser para ti
esa mujer difícil de olvidar.
YOLANDA BARRY