Araceli Vellber

Existe Siria.


Aquí se marchitan las flores
el agua es azufre
y la Reina de Corazones
tiene conmigo, un baile pendiente
y Blancanieves no se despierta con un beso
quiere sexo,
y sexo con posturas
y ella decide cuándo se mira al espejo,
hace tiempo dejó de ser una niña,
aunque no llegó nunca a ser bruja,
pero todo lo que toca lo convierte en ceniza,
y los zapatos de oro
están en manos de los prestamistas.
Hace tiempo que no hay cuentos,
y los pocos cuentos que quedan, huelen a muerto,
son niños que mueren solos en las playas,
no hay casas,
no hay comida
el aire, es el sonido de una bala
y a mí por dolor, me duele hasta el alma.
Aquí el Sol se despierta, igual que cuando calienta mi cara,
pero prefiero que no ilumine nada,
la Luna deja a los llantos dormir tranquilo,
pero solo hasta mañana.