Mientras florecen las buganvilias
emergen los recuerdos…
éramos la primavera en flor,
el río rebelde en los inviernos,
y del verano su calor.
Al llegar el otoño de nuestra vida
evaluamos lo vivido…
frutos, generando sus semillas
con el germen de aquellas flores
producto de nuestros amores.
Será el secreto entre nos
la esencia que se guarda
en la vasija del amor
que compartimos
con el canto del
ruiseñor