Aquí viene...
hay un momento para besar y decir,
nunca pensé en como llamarte,
!Solo pensé!
hasta las estrellas tiene nombre.
Descubrí en unos segundos, tus ojos,
que parecían preceder,
alguna filtración ordinaria mía,
que como una revelación,
me hizo mecer, y yo pensé, que me engañaron.
Quise volver a multiplicar la noche,
una noche acompañada de otra,
en algún día que quieras,
al que no levanto ceja,
y ningún ademan de molestia.
Es como me vienes siempre,
siquiera una de cada dos,
haz es el día que quieras,
!no lo se!
sin sabiduría,
ni conciencia,
ni en los días previos,
pero se que me tenias,
y pudo haber sido tu beso el que me dejo secuelas.
Humberto Velásquez Jiménez
3/Marzo/2016
10:17 a.m.