En el fondo de
mis miedos.
En el tiempo
del olvido.
En las sombras
de las luces.
De cada lugar
al que he ido.
Te busqué
siempre.
Y aún sigo al
hablar
contigo.
En el cielo y el
infierno.
Porque siempre
te he querido.
Porque nunca
me has
sentido.
Te busqué
siempre.
Desde el día en
que nos vimos.
Para hablarte
eternamente.
De un amor
que no
vivimos.
En el beso que
nos dimos.
Sin haberte
conocido.
Te busqué
siempre.
Porque eres
algo mío...
Rafael Pablo