Ni yo sé cuanto te quiero,
podría existir alguna forma de probarlo,
en discusión llegaría a algún aproximado
con sinónimo de incalculable, indefinido,
además de intangible será inexacto.
Sería como dividir entre todo y entre nada,
realizar una ecuación de innumerables resultados,
o como una prueba química arriesgada
con componentes nuevos arrojando como producto
una inusual explosión.
Antes, peleaba contra ello,
asumía en mi dilema que te alejaría
perdiéndome en aventuras temporales
de pasiones locas y desvaloradas.
Me he rendido frente a esa pelea,
he re fundado la idea en el olvido
porque si hay mente sin corazón
no existirá armonía y no habrá coherencia
entre un ser enamorado que vive así confundido.
Dejo el sentimiento tan cristalino
como el mismo se ha hecho,
si en años no he podido olvidarte
ya ni me inmuto en eso
pues no voy a condenarme
a simular no sentir la verdad del sentimiento;
y en problemas no resueltos
ni yo sé cuanto te quiero…
A.Maestre