Plegaria al amor
¡Oh amor! levántame en tu placer,
sostenme en tus brazos
y no me dejes nunca caer,
mi corazón rompería en pedazos.
El humo sube bien elevado
y envío un mensaje de amor,
eres mi todo… mi eterno amado.
Cuando tengo sed de ti, bebo
de tu agua transparente
y alivia esta ansiedad,
limpio con lágrimas tu fuente,
son ellas de felicidad.
En mis ojos está tu amor cuando te miro,
en mis labios, este tiempo de cambios
en mil suspiros…
que brotan cuando te llamo.
¡Oh amor! en mi vientre hecho ola
que te abren sus brazos
cuando estoy tan sola.
El tiempo no me puede acompañar
mis perdidas primaveras
y si tú estás de amor estoy plena.
Mis palabras quedan en silencio
si tú no estás.
Mi enamorado poder
me da fuerzas alimentando mi querer.
Cuando tú pides este tiempo que guardo
en mi ser,
si estás junto a mí, es que lo puedo palpar
y lo puedo ver.
Aunque pidas hasta amar lo imposible
yo lo conseguiría.
¡Oh amor! tú fortalece al espíritu caído
y alimenta cuando brotan mil quejidos
por estas ansias tuyas y mías.
Eres causa que ennoblece
mi casa del alma
donde te espero arropada
con este tiempo de calma
y en que muero de celos.
Formas partes de mis indecisiones
y desvelos que expongo a tus antojos.
Tú eres de mis ojos su mirada
que está en toda tu vida
y en lo que diariamente ves
y en este instante que te digo:
“No hables de soledades que tú me llenas
cuando en ti me inspiro”.
¡Oh corazón! destinado al mundo de suciedad
y ya el tiempo no me alcanza para alzar
en alto mi verdad,
¡que te amo y el silencio
me acompaña en mi realidad!
Si supieras que por ti soy todo,
que soy parte de tu piel,
hoy te he sentido en este frio
que recorre mi ilusión,
es tiempo de elevar mi pedido
y que lo encierres en tu corazón…
¡No me olvides amor!