Wilson Amado Gamboa

Puritanos impúdicos y sándalos

Te buscaré en el día,
te seguiré en la tarde,
te encontraré en la noche.
Y en tus brazos tan débiles
y en tu cuerpo tan pálido
mis caricias son tórridas.
Y te amaré con ilógica
morbosidad filantrópica
de libertad impúdica.

Y le diré a los vientos,
y le diré a las damas,
y le diré a los hombres
que tus labios son pétalos,
tus perfumes son sándalos,
tus caricias son cálidas.
Que tus amores son mórbidos
en los silencios más sórdidos
de puritanas páginas.


Y quedarán mis labios
con el sabor del beso
que prohibido encanta,
de tus labios de pétalos
en tu cuerpo tan pálido
con perfume de sándalos.
Y en la mañana más pálida,
tras tu sonrisa algo tímida,
mi pensamiento impúdico.