Monroy Gemio Pedro

SIEMPRE ESTARÁS EN MI.

Yo quiero tenerte en un vaso...un vaso negro,

un vaso... humilde de cristal oscuro,

con tus cenizas cerca de mi vista,

el vaso hija será tu cuerpo,

y con mis manos tocando el vaso,

sabré que estamos unidos para siempre,

mi alma y tu alma quedaran apaciguadas.

No deseo un vaso de oro, ni grandes reliquias

ni de grandes ornamentos, ni siquiera de un cristal de lirios,

ni de olores ni colores...negro simplemente,

solo un vaso normal, tapado de cristal oscuro,

humilde como un vaso de cualquier casa.

Yo iré a comprar ese vaso

a la tienda de siempre

a la vuelta de la esquina, esa que tu conoces,

preguntaré si existe un vaso, uno oscuro,

mediano simplemente, no grande  

yo solo con un vaso tengo para mi niña.

Nadie sabrá que guardare allí, nadie sabrá el valor,

nadie sabrá el puñado de polvo y el costo de ese vaso

sino tendría miedo que me lo robaran,

me iré al campo donde tú querías, donde jugabas

lo lanzaré despacio, como si de polvo se tratara,

se ira vaciando poco a poco, lentamente

y yo al final sellaré ese vaso, con un beso sobrehumano

y mi lagrima y mi única mirada será tu manto,

y te iras porfín a respirar tranquila,

a llenarte de cielo los pulmones

y vendrás a nosotros con las lluvias 

en las nubes y en las estrellas

con el nuevo sol y los aires templados

 

 

P.M Pedro Monroy Gemio