“Homenaje a mi barrio y sus calles”
Subiendo la cuesta
de mis pensamientos,
voy viendo lugares
que ya no están más,
culpa del progreso
que todo destruye,
no tiene conciencia
ni mira...hacia atrás.
Mi mente me recuerda
las citas incumplidas,
amores que no fueron
y esta soledad,
transito por Cabildo
me llego a Juramento,
la espero, pero en vano
ella nunca... volverá.
Voy abrazando recuerdos
mientras el eco retumba,
de mis pasos tercos
que transitan por Melián,
árboles que techan
la calle con magia,
y mi nostalgia me dice
que no vale... llorar.
Me vienen de lejos cosas
que en mi mente se grabaron,
y de la mano de un duende
con mis ganas me llegué,
hasta las Barrancas
lugar de reencuentros,
pero un hada buena
me dijo...ya fue
Un día cualquiera
la inocencia se vuela,
dejando un vacío
que duele muy hondo,
quisiera ser pibe
de nuevo un ratito,
en la amada placita
de Moldes...y Arredondo.
La Casa Del Ángel
un pedazo de historia,
el frío ladrillo
impuso su razón,
hoy ya no se tienen
en cuenta valores,
cuando el vil dinero
piensa...en la inversión.
En alguno de mis sueños
yo me veo caminando,
y tras la bruma presiento
que enseguida voy a oír,
al tranvía traqueteando
amasijo de lamentos,
lo espero, él nunca falla
en Cabildo...he de subir.
Llegado el día preciso
en que cambie domicilio,
hacia una estrella amiga
para siempre titilar,
les contaré con dulzura
a los ángeles del cielo:
que en Loreto y Amenábar
tuve mi casa...y mi altar.
Boris Gold (simplemente…un poeta)