El sol y la luna,
La tierra, los pastos,
El verde del agua,
El azul del cielo,
Tus ojos, tu cuerpo
Fornido y discreto,
Tus manos que tocan
Con ansia y premura,
Con fastidio y fuego,
Con fiebre o con pena,
Se quedan conmigo
Junto al sentimiento
De días sin paz
Y orgullo sin sombras.
Cuidáte y vestíte
Con traje de lino
Y camisa fina,
Con zapatos buenos
De cuero argentino.
Viví en cuarto limpio
De todos los días,
Pescáte un resfrío
De tanto mirar
Al cielo infinito,
Al bicho que corre,
Al pájaro zonzo
Cantando en un árbol
Que esconde algún nido
Y el temblar de frío
Con besos de tilo.
Mis labios dormidos
Casi no te nombran,
Sólo te recuerdan
Rodeando la ronda
De chicos jugando
Cubriendo sonidos
Una madrugada
En las vidas sordas.