Cinco estrellas surcan el cielo,
mirando por la colina,
palma a palma el horizonte,
enciende por la colina enclavada.
Una higuera se desliza por el campo,
buscando un árbol de diez mil ramas,
al final solo encuentra dos ramas en las alturas.
¡sube alto en el cielo!
dice la colina,
mostrando su esplendor,
la naturaleza se afirma,
como rosa enpalmecida,
cuan terciopelo.
En un lado la montaña,
y en el otro la colina,
desciende de la montaña,
cuán asombroso descubrimiento,
dos ramas en el cielo,
cuán dulce melodía.
CC