Me gusta vivir
en un lugar
lejos de toda preocupación
Ajena de todo,
hasta de mi misma.
Me encanta venir acá
donde no hay nadie, nadie.
Donde esta todo, todo oscuro
donde ni viento hay,
ni una luz, ni una luz
y sólo se ve, alrededor,
-ni las manos, ni las piernas, ni los pies-.
Un par, muchas, cuantas letras yo quisiera hacer aparecer.
Cuantas letras flotantes, suspendidas o móviles quiera ver.
Y hay una, hay una música de fondo, una radio, una suave radio
que las mueve
a las letras.
Que hace de viento donde no hay nada más que eso.
Donde me encanta,
donde amo estar
y donde viviré por siempre.
Entre letras
con las letras que yo elija.