Tantas veces jugamos con la lluvia
Como quisiera correr pisando el barro
para sentirme hermano de los pájaros,
con manos juntas y alas unidas
dándonos calor unos a otros....
Almas gemelas con la lluvia,
las piedras, la tierra suelta,
la nube, el viento puelche,*
los pájaros y el hombre de campo
que trabajando aprende a vivir
junto con ellos...
Naturaleza toda, comienzo y fin de realidades,
sueños vuelos y sueños ciertos,
alcanzados y vividos
a veces lejos,
compartiendo el pan diario
sin olvidos...
Cuantas veces jugamos con la lluvia,
cuántas veces protegidos por un techo
vimos jugar sus gotas juegos miles,
bajo un limbo de vapores transparentes
elevándose al cielo,
como cintas de regalo de los dioses,
serpentina de colores fuego...en silencio
- arco iris mágico.
Convencido de sus juegos
saltamos al viento
sin temor a mojarnos,
sin temor a los retos
participamos...
de esos juegos miles
que no elegimos;
porque sin ser lluvia,
por momentos, si lo fuimos...
Hicimos rondas, saltamos charcas,
fuimos estrellas fugaces
consumiéndose en la tierra seca,
alimentamos raíces de los árboles,
matorrales, pasto, flores, cañaverales,
hortalizas libres y totales,
alimentamos vidas...
Fuimos corrientes, formamos vertientes,
bajando los cerros, fuimos esteros,
rompiendo compuertas unimos fuerzas,
sin curso fijo, fuimos torrentes,
causamos daños equivocados...
Sumando fuerzas,
dimos luz a mucha gente,
barrio por barrio, pueblo por puebo
- corrientes útiles, energía limpia
tan necesaria...
Cuantas veces jugamos con la lluvia...
*voz araucana, viento que pasa por sobre los Andes.