¡Huyo de ti!
La sinfonía me llama.
Me entregué a tu idioma
sin lenguaje
me ovillé
en los hilos de tu vida.
¡Eres prisión!
¡Eres cadena!
Los ángeles de tus pupilas
ruegan
tu usanza al silogismo
no es sincera
¡Huyo de ti!
Tus sonidos sin acordes
son tormentos
y yo quiero cantar
hasta que muera.