¿Porque te pienso? me pregunto.
¿Será que te pienso para callar los gritos ensordecedores del silencio
o para llenar mi cuarto frío con la tibieza de tu voz?
¿Será que me he cansado de escuchar las platicas vacías de mis fieles y bulliciosas
compañeras: Soledad y Depresión y quiero ahuyentarlas con tu sonrisa?
¿O será porque el pensarte me da vida y despierta al joven dormido, haciendo latir de nuevo
el corazón paralizado por los años?
¡Y como no pensarte si el hacerlo trae un haz de luz a mi ventana y una canción a mis labiosǃ
Aún la nieve gélida y melancólica se rinde y se derrite ante tu recuerdo.
Te pienso aunque no quiera, aunque no deba.
Te pienso por las mañanas cuando tus ojos me despiertan,
por las tardes cuando tu esencia me persigue, por las noches cuando tu voz me acaricia.
Quisiera ahuyentar tu imagen de mi mente por una hora, por un minuto, por un segundo
--mas no puedo.
Dime tú ¿Cuál es tu secreto?
Dime tú ¿por qué te extraño?
¿Porqué extrañar el perfume que nunca he aspirado, o la piel que mis manos no han rozado?
¿Porqué extrañar los labios que mis labios nunca han encontrado?
Abre tu boca y explícame esto que siento.
Más tú te escondes detrás de una fotografía y enmudeces. Burlona. Coqueta. Y me atormentas.
Y yo me rindo ante tu recuerdo.
¡Esta bienǃ Ya basta de razonarlo, te pienso ¿y qué?
No me importa el tiempo, ni la distancia que nos separa.
Me gusta pensarte. Me gusta extrañarte.
Te pienso porque te pienso.
Te extraño porque te extraño.
Te amo porque te amo.
Y no hay nada que pueda hacer al respecto.