Por todas las horas de las horas que nos quedan
de hoy, de mañana y de todos los días que nos quedan
de estar juntos,
de hablarnos,
de ignorarnos,
de mirarnos,
de tocarnos,
de soñarnos,
de cantarnos,
de pensarnos,
de besarnos,
de amarnos ...,
y de todo el todo que nos queda de querernos.
Yo estaré allí, a tu lado en todo lo que nos queda
de amar juntos.
Estaremos en esa nuestra búsqueda
de tenernos sin saciarnos.
Yo estaré allí, y los dos seremos uno.
Incluso entre todos los humanos, tu y yo seremos uno.
Y estaremos allí; tu conmigo yo contigo somos uno.
Solo somos uno.