Soy el sauce llorón en quedo triste:
un cascabel parece mi desvelo,
se acaba ya la tinta que me diste
y al alma desdibujo, la empapelo…
Soy lluvia en el ocaso; tú me viste
cuando estaba de bruces en el suelo,
pues quisiera salvar lo que rompiste
aquí en el soliloquio donde apelo.
¡De balde estoy en vilo…sin pestañas,
buscando la mejor de las versiones
para alegrar la música que empañas…!
¡No valen los cojines de algodones
ya no me arrullan ni hacen musarañas,
ay, ni enjugan mi llanto en los rincones!