A veces el musgo tiene sueño,
pero sigue creciendo,
las palmeras parecen tristes
pero siguen siendo apasionadas,
los baúles de buenos recuerdos tiene ganas de irse,
pero continúan ahí,
donde miles de telarañas siguen tejiéndose
y cantando,
algunas canta hermosamente,
y otras nunca aprenderán a cantar,
a veces la madera se convierte en elegante mueble,
y a veces alimenta el fuego,
ahí en donde los ecos se repiten mil y más veces,
el intelecto por momentos se quiere secar,
y las semillas se quieren morir
ahí donde nacen las alas,
y donde a veces se quiebran,
desde ahí has de empezar.