Cuando la noche va llegando silenciosa
y el momento de pensarte está conmigo,
la noche -esa misma-, no es dichosa
aunque esté presente Dios como testigo.
Cuando otro día nace luminoso
y me enfrento a la vida trabajando,
no consigo ni un momento de reposo
y tú en mi mente, a mi lado caminando.
Que el silencio de esta noche me permita
ir volando hasta tu lado en un instante
y escuchar tu corazón cómo palpita
y que la luz de la mañana fulgurante
me recuerde lo pendiente de una cita
por la noche, en tu pecho palpitante.
Derechos Reservados de Autor ®Rafael Rendón Contreras Safe Creative.org
Código de registro: 1607308476675 Fecha de registro: 30-jul-2016 16:11 UTC