El viento se expresa en
postas entre las baldosas
húmedas y la voluntad ajena.
Así me llego la zamba
enrolada en la cuna.
Con sus rasguidos,letanías de
sombras, sus dedos mellados,
sus uñas roídas y su voz vinosa.
El se gana su jornal
esnsaimando los oídos anónimos.
Me arrastra hasta el rio y
queriendo volver se va la segunda.