\"No por tus obras tus tesoros midas sino que el alma, de fé pura en pago, se levanta merced a sus caídas\".
MIGUEL DE UNAMUNO
Cuando se hicieron transgresores de lo honesto,
desgastaron las palabras cotidianas,
se recrearon en decirse lo indecible
y agotaron torpes planes sin mañana.
Y de pronto se convierte la mañana
en una luz tan verdadera… inesperada,
y con la noche esa mañana es el binomio
que resquebraja los anhelos imposibles
que ya de sí eran utopías inaudibles
que ya eran todos una ciénega alfombrada.
Y así la vida da las vueltas necesarias
cuando el silencio nos invade la conciencia
cuando la luz y la penumbra se entremezclan
cuando la historia más genuina se incomoda.
Y entonces gritan las verdades implacables,
que no hay pasado que resulte tan ileso
que no hay palabras en que ajuste el embeleso
el mismo arrobo que los hizo censurables.
Así de pronto cuando nace un nuevo día,
hay un camino de retorno hacia lo justo,
y muchas lápidas de vidas malheridas
aunque hay un roble que da sombra con su arbusto.
Y ese retorno de subida y de reencuentro
les va dejando los pedazos de mentiras;
la redención de sus miserias que suspiran
por una vida, nueva vida, desde dentro.
La tarde llega; el horizonte azafranado
por una llama que al ocaso purifica,
que marca -al fin-, el armisticio que rubrica
la interna paz, la paz genuina, el bien amado.
Y así anochece bajo cúmulos plateados
que dan certeza y claridad al nuevo rumbo.
Derechos Reservados de Autor ® Rafael Rendón Contreras
SafeCreative.org Código de registro: 1608068557826 Fecha de registro: 06-ago-2016 5:29 UTC
Agradezco a Hugo Emilio Ocanto la magistral interpetación que hace de este poema en el siguiente link:
http://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-417826