Sal luz del nuevo día
que duerma noche hiriente,
para que los pájaros
vuelvan con su trinar.
Que suene la canción
retenida, silenciada,
que salgan de lo oscuro
las rasgadas mañanas.
De lo alto bajen aguas
se conviertan en río,
y suelten los sonidos
de las voces chirriadas.
Que domine de la pradera
ese azulado cielo,
el rojo de amapolas
y verde del verde trigueño.
que giren los girasoles
sus pétalos amarillos,
que miren hacia el sol
ardiente y cristalino.
Piérdete maldades
en hondo laberinto,
y enciéndete candil
de nuevos amaneceres.
Lola Barea.
Código de registro: 1605017392491