El paraíso es ahora.
No fue ayer, ni será mañana,
ni siquiera es hoy.
El paraíso es un instante
que en cuanto se acerca,
ya pasó.
Afortunadamente,
cuando el momento se va,
no tarda mucho en regresar.
El paraíso es respirar color,
respirar color y alimentarse
de luz y de calor.
El paraíso es bailar.
Ya sea solo o acompañado,
con o sin música.
El paraíso es disfrutar del ritmo
que hace el sonido de un grillo
que canta a la luna y al río.
Es escucharse en el silencio
y apreciar que no está vacío.
El paraíso es entender,
que el silencio da pauta
a que una conversación
se vuelva sinfonía.
El paraíso es amor,
el paraíso es rebeldía.
Es el combate de dos cuerpos
que con gran valentía,
discurren al vaivén
de las sábanas contra la piel.
Es librarse de los grilletes del tiempo
y de la angustia de la muerte.
El paraíso se vive en vida
y se vive a cada instante.
No fue ayer, ni será mañana,
será lo que quepa en la mirada.
El paraíso es ahora.