Ah, dulce sonido Armonía instrumental, La que escuchan mis oídos, Con un aire orquestal. Dualidad delicadamente puesta, Entre los instrumentos afinados Y tu voz que nada le impedimenta, Producir versos refinados. Pende delicadamente, El sentimiento abstracto, Que juega inocentemente Como notas en el acto. ¿Cual será pues la diferencia Entre los dulces sonidos? ¿La armonía de tu voz y su complacencia? ¿O el acústico en las cuerdas transmitido? Un solo concierto he escuchado Y de ti me he enamorado, Un compás de movimientos acordados, Que toda una galería han completado. Un conjunto enorme de contrapuntos Es el que se ha formado en mí ser, Formado de sentimientos ocultos Que la tristeza hace perecer. Las notas dando sentido, Al arte musical, El mismo sentido que has transmitido A mi forma de amar. Una tan sola vez al escucharte Me obligaste a sacar la conclusión, Que mi sentimiento por ti es arte Y nuestro amor es la canción. Eres la más bella canción, La mayor de notas armonía, La más completa de acordes organización, Que por escuchar de nuevo moriría. La mayor armonía sinfónica Que yo te prometo siempre amaré, Y la canción hermosa Que jamás a escuchar volveré.