Pienso en ti durante el día,
resides siempre en mi mente,
no puedo borrar la imagen
ni con tiempo suficiente.
Mi propia imaginación,
mira tu ser claramente
como los rayos del sol
que percibo en el ambiente.
Sintiendo mi soledad,
mi corazón es consciente
del vacío de tu ausencia
y añora tenerte siempre.
Mi alma se embarga de ti,
tancallada e indiferente
percibo que vibras en mi
con tu voz lánguida y breve.
Por la noche al acostarme
cuento las horas silentes
pensando en ti con pasión.
Se hace la llama más fuerte.
Al amanecer te añoro
y sueño con los placeres
que me brinda tu cariño
y tus palabras alegres.