Mi alma es arropada por la afligida melancolía de un recuerdo agobiante,
colgada estoy, por no tener las agallas de enfrentar lo atemorizante,
mis heridas sagran continuamente.
Aislada y condenada por años sin sosiego,
el ayer se ha vuelto ciego,
de mis sentimientos hubo un trasiego.
He sido olvidada a causa de el aislamiento,
ni tan siquiera mi sombre recuerda lo que siento,
la soledad me ha robado el aliento.
¿Por qué no hallo quietud?,
¿Dondé se ha ido la misericordia?,
Nunca ha existido.
Acorralada estoy por las pesadillas del ayer,
se agotaron mis fuerzas, apenas me puedo mecer,
resignada estoy de quién pude ser.