boris gold

CON UNA LÁGRIMA...RIEGO UNA ESPERANZA

CON UNA LÁGRIMA…

RIEGO UNA ESPERANZA

 

 

 

Yo que he caminado

por distintos sitios,

tras de geografías

para así aprender,

algunas me sirvieron

otras fueron nulas,

jamás he pensado

lo que iría...a ver.

 

Mi Argentina amada

que como una madre,

dio cobijo a tantos

y les brindó calor,

esa misma gente

pagó con trabajo,

sacrificios y lágrimas

y mucho...la amó.

 

Fue como amalgama

un crisol de razas,

que creyó olvidadas

por fin el horror,

no pensó ni en broma

que irían de nuevo,

a ver estos actos

de cruento...dolor.

 

Un puñado artero

de imberbes mesias,

se creyeron dueños

de la gran verdad,

llovió tanta sangre

volaba la AMIA,

y hasta el mismo cielo

lloró...en soledad.          

 

 

 

 

 

Ausente de todo

huyó el buen sentido,

la que siempre juzga

el bien y el mal,

la esperanza huérfana

se quedó muy sola,

más los muertos de AMIA

siempre aquí...estarán.

 

Pero se que un día

el menos pensado,

el país entero

de luto vestirá,

pues las almas buenas

los muertos de AMIA,

saldrán de sus tumbas

y justicia...pedirán.

 

El mundo está absorto

no entiende que pasa,

si la vida humana

no vale nada ya,

tantos años pasaron

de cargar sus penas,

y los deudos piden

por favor...piedad.

 

Hoy el pueblo entero

mira con espanto,

esta cruel tortura

por la acción atroz,

ochenta y cinco vidas

que siguen esperando,

no hay culpables y se me hace

QUE clama angustiado...el buen Dios.

 

Boris Gold   (simplemente…un  poeta)